Para esta etapa la alimentación de tu hijo se deberá ir asemejando cada vez más a la comida de casa. Recuerda que su estómago es muy pequeño aún así que te recomiendo escoger bien las comidas que ofrecerás de manera que estas sean lo más nutritivas posibles. Lo mejor será que limites el consumo de azúcar en todas sus formas, ya sea galletas, pasteles, jugos y dulces…recuerda limitar no es prohibir. Eres tú quien escoge que comidas le presenta y él quien decide cual de ellas quiere comer. Por ejemplo le pones a escoger entre un huevo revuelto y avena, y será el quien te diga cual de las dos quiere comer.
Alrededor de los 15 meses tu hijo ya podrá empezar a usar cubiertos, ten paciencia y ayúdalo en este proceso de aprendizaje.
Consumo de leche
La leche es una buena fuente de calcio y vitamina D, dos de los componentes principales para construir huesos fuertes. Se recomienda que un niño entre 1 y 2 años consuma leche entera, ya que la cantidad de grasa ayuda a su desarrollo físico y cognitivo. Alrededor de esta edad también puedes empezar a ofrecer la leche en vasito, puedes sustituir la pacha con un vasito en algunos tiempos de comida y hacerlo gradualmente mientras tu hijo se acostumbre. A algunos niños no les gusta la leche de vaca ya que el sabor es diferente al que están acostumbrados. Te recomiendo que cuando introduzcas leche la mezcles ya sea con formula o leche materna (depende con que fue alimentado antes del año) para que la aceptación del sabor sea más fácil.
Sobre el hierro
Esta es una edad en la que tu hijo necesita una alimentación con muchas fuentes de hierro. La falta de hierro puede causar anemia, la cual tiene repercusiones no solo físicas sino también cognitivas. Algunas buenas fuentes de hierro son: pollo, res, frijoles, y comidas fortificadas con hierro. El alto consumo de leche, más de 16 oz al día, puede causar deficiencia de hierro, la leche no es una buena fuente de hierro. No es recomendable ofrecer más de 16 oz de leche en esta etapa, esto lo pone en riesgo de anemia.
Porciones
Recuerda que las porciones no son las mismas de un adulto. Procura presentar un plato lleno de colores y texturas, por ejemplo: remolacha, elotitos y pollo. Ofrece 5 tiempos de comida al día, y espera que hayan veces que no quiera comer nada, es normal, no lo obligues a comer. En cambio, ofrece opciones saludables en el siguiente tiempo de comida y permite que él elija cual de esas opciones quiere comer. Nunca es buena idea obligar a tu hijo a comer, esto puede crear una atmósfera de estrés en los tiempos de comida y no le permite seguir la señal de hambre y saciedad de su cuerpo.
Si tienes más preguntas no dudes en consultarme, estoy a la orden.
Licda. Jimena Tejeda, Nuticionista
Consultora en Lactancia (IBCLC)